Mostrando entradas con la etiqueta Palabras encadenadas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Palabras encadenadas. Mostrar todas las entradas
Cuentas pendientes
Ella sintió de golpe cómo se le abrían todas las cicatrices, él creyó que así la podría retener. Nada más lejos de la realidad. Aquella mujer que todavía creía amar ya había trazado un plan de huída perfecto, incuestionable. Él siempre había pensado que tenían un asunto pendiente, no sabía muy bien qué, pero el hecho de pensar en ella varias veces al día durante un largo período de tiempo y ausencias, le daba indicios de que aún no la había olvidado. Aún así, tampoco sabía exactamente lo que quería ni cuándo ni cómo, sólo sentía que algo le ardía por dentro y contra eso si que no podía luchar. Después de aquella noche ella desapareció para siempre, no porqué no lo amara, ni porqué ya no sintiera esas mariposas en el estómago. Simplemente desapareció porqué a esas alturas de la guerra ya no tenía fuerzas para iniciar otra batalla.
Etiquetas:
Palabras encadenadas,
Prosa y algunos versos
Suposiciones
Él la estampó sobre la pared de aquella calle oscura y poco transitada. Tenía una sed desmesurada de bebérsela a lametazos improvisados y ella, silenciosa, se dejaba hacer. La ató de pies y manos con cuerdas invisibles mientras redescubrían los rincones de sus bocas, desesperadas por el reencuentro, diciéndose de esa manera todo lo que no sabían decir con palabras. Ella sintió de golpe cómo se le abrían todas las cicatrices, él creyó que así la podría retener.
Etiquetas:
Palabras encadenadas,
Prosa y algunos versos
Suscribirse a:
Entradas (Atom)